La duración de los juegos en la pelota invernal baja con respecto al pasado

En Grandes Ligas ven una locura que un fanático tenga que pasarse tres horas siguiendo un partido, ya sea por los medios tradicionales como radio y televisión o asistir a los parques por ese tiempo.

En la Lidom es un tema que no llega a la agenda desde que en 2015 se adoptaron medidas con el uso del roster.

La media de duración de los primeros 108 choques del calendario en la fase regular 2019-20120 llegó hasta las tres horas y 36 minutos (3:36), una reducción de casi 10 minutos con respecto a la temporada pasada cuando en los 150 partidos de la fase rozó las 3:45.

 
Es decir, un partido que arranca a las 7:15 finaliza a las 10:46 de la noche. Pero es un tiempo que varía según el estadio, con el común denominador de que el uso de lanzadores altera el cronómetro.

En realidad, hay 53 partidos que superan esos 3:36 cuando se incluyen los extrainnings, 18 de ellos pasaron de las cuatro horas, como el Gigantes-Licey del 23 de noviembre que se extendió por 6:25 en 16 capítulos.

La victoria del Escogido sobre los Gigantes por 2-0 en el Quisqueya el 19 de noviembre solo duró 2:26, donde Gabriel Ynoa y David Kubiak se enfrascaron en un duelo de pitcheo. Ha sido el choque más breve y en el que menos brazos pasaron por la loma de los sustos (7).

Hubo 10 choques que no alcanzaron las tres horas.

A las Estrellas les tomó 4:28 conseguir su triunfo 8-5 sobre el Licey el pasado martes, también en el parque bautizado con el nombre de Juan Marichal, el encuentro más corto de la justa entre los que han transcurrido en nueve entradas y uno donde se requirió de 16 lanzadores.

En el torneo 2015-2016, los partidos de la fase regular duraron 3:24.
Más y menos
Los partidos del Escogido como home club son los más cortos. Solo duran 3:26 y allí intervienen 12,2 lanzadores.

En cambio, los de las Estrellas en el Tetelo Vargas son los de más duración con 3:45 y 14 pitchers.

En el Julián Javier bajan a 3:31, en el Cibao llegan a 3:34, en el Quisqueya con el Licey sube a 3:41y en el Francisco Micheli se disparan a 3:37.
Uso de lanzadores
Entre los dos equipos que se enfrentan en cada sede se está utilizando una media de 13 lanzadores, uno de los puntos que se buscó atacar hace cuatro torneos (2015-2016) cuando se eliminó el “sube y baja” que limitó a 40 hombres las nóminas semanales y de ellos utilizar un máximo de 25 por fecha.

Las Estrellas lideran la casilla con 259 hombres enviados al montículo, mientras que en la cola van los Toros, con 197, con la diferencia de que los petromacorisanos han trabajado 10 entradas más, puesto que han tenido siete partidos de entradas extras contra solo dos de los taurinos.