Licey anuncia cuerpo técnico completo; Mesa al Pabellón de la Fama

SANTO DOMINGO – Tras la promoción de Joel Noboa como asistente del dirigente Robbie Hammock y D’Angelo Jiménez a coach de bateo, más el retorno al dugout de José Offerman como el coach de banca, Operaciones de Béisbol de los Tigres del Licey dio a conocer el cuerpo técnico completo para la temporada del béisbol invernal 2018-2019, dedicada a Vladimir Guerrero por su exaltación al Salón de la Fama de Cooperstown.

El gerente general Luis Urueta informó que el puertorriqueño David Rosario es el coach de pitcheo, quien está al frente de su área desde que los Tigres iniciaron sus entrenamientos el lunes 17 de septiembre en la Academia de los Marineros de Seattle, en Tierra Alta, Boca Chica.

Rosario tendrá como asistente a José -El  Tío- Mercedes, como coach del bullpen y  a Vladimir Pérez, con toda una vida en el staff, sigue como asistente de bullpen.

Como asistente de D’Angelo Jiménez en su condición de nuevo coach de bateo, fue colocado el ex jardinero Luis Terrero, quien jugó de manera breve al final de su carrera y debuta en el equipo como técnico.

Urueta confirmó a Héctor «La Manta» de la Cruz como coach de tercera base, a Manny Martínez de primera y Silvestre Campusano de jardineros.

Una incorporación de la oficina de Operaciones es Raywillis Gómez (hijo de Pedro Gómez, quien en noviembre será exaltado al Pabellón de la Fama del deporte dominicano), quien fungirá como manager de la Liga Paralela.

El joven Gómez tendrá como coach de bateo en la Paralela, a Timoniel Pérez y  de pitcheo al también exgrandesligas Carlos Pérez. Fleming Báez, es el coach de receptores, mientras que Luis Bernardo y  y Joel Roa, son receptores del bullpen.

Se recuerda que Joel Noboa fungió en las recientes dos pasadas temporadas como el coach de bateo de los Tigres y D’Angelo Jiménez como su asistente.

En cuanto a Offerman, exjugador de las Mayores y  fue manager del Licey, en los últimos años fungió como asistente especial de los dos gerentes generales anteriores y en ausencia del manager Hammond y su asistente Joel Noboa, está al frente de los entrenamientos.

José Mesa, electo al Pabellón de la Fama

El Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano anunció la tarde de este martes la escogencia del ex lanzador José Mesa para la inmortalidad  deportiva.
 
La elección de Mesa coronará la gran trayectoria que tuvo el nativo de Azua en casi dos décadas de carrera en las Grandes Ligas, trecho en el que se comportó como uno de mejores relevistas de cierre del negocio. En el béisbol invernal lanzó para los Tigres del Licey.
 
Su escogencia recayó sobre los periodistas y cronistas deportivos de todo el país, que durante varias semanas tuvieron la oportunidad de decidir dos deportistas mediante un novedoso sistema de voto electrónico implementado este año por el Pabellón de la Fama.
 
Dionisio Guzmán, presidente del Comité Permanente del Pabellón de la Fama, expresó que un segundo deportista elegido por los cronistas será anunciado en los próximos días.
 
Con Mesa suman cinco los seleccionados hasta el momento para abrazar la inmortalidad del deporte nacional en el 52 Ceremonial de exaltación que se celebrará el domingo 11 de noviembre en el auditórium principal del Pabellón de la Fama, situado en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte. El acto de inmortalización comenzará a las 10:00 de la mañana.
 
Mesa es el segundo pelotero profesional escogido hasta el momento, luego de la previa elección de Tony Batista, y el tercero en general. El otro votado para la inmortalidad es Pedro Gómez, uno de los mejores exponentes que ha tenido el país como selección nacional de béisbol y softbol. Guzmán recordó que Rafael -Fey- Duquela y Héctor -Cuqui- Acevedo, como propulsores, también serán inmortalizados este año.
 
Carrera de 300 salvados
 
Periodistas y cronistas valoraron la dilatada carrera de Mesa por 19 temporadas en las Mayores. Reclutado como profesional en 1981 por los Azulejos de Toronto, su firma llegó como jardinero y por la potencia de su brazo fue convertido en lanzador abridor y luego hizo la transición a relevista.
José Ramón Nova Mesa, 52 años, fue uno de los taponeros más dominantes del béisbol y llegó a ser el rey del salvamento entre los dominicanos. Se retiró en 2007 con 321 partidos salvados y un liderato de rescates, logrado en la Liga Americana con 46 en 1995, con los Indios de Cleveland.
 
En este gran año, tuvo una efectividad de 1.12 y 38 de los 46 salvamentos los registró en apariciones consecutivas en situaciones de salvados, lo que se convirtió en un récord de las Mayores y fue decisivo para que los Indios lograrán un récord de temporada regular con 100 triunfos y 44 derrotas para avanzar a su primera Serie Mundial desde 1954.
 
En la actualidad ocupa el tercer peldaño entre los taponeros del patio, superado por los 329 de Francisco Cordero y 325 de Fernando Rodney, quien se mantiene activo.
 
Además de todos sus salvamentos, Mesa tuvo registros totales de 80 victorias y 109 derrotas, efectividad de 4.36 y WAR de 11.5. Lanzó en 1022 partidos, 95 de ellos como abridor en los primeros años de su carrera. Lanzó 1548.2 tercios de entradas, ponchó a 1038, otorgó 651 boletos gratis y terminó con WHIP de 1.472. Toleró 1629 hits y le anotaron 811 carreras, 750 limpias. Fue fue convocado a dos Juegos de Estrellas.
 
Fue subido a las Mayores por los Orioles de Baltimore, organización con la que jugó por cuatro temporadas. Debutó en 1987 lanzando en cuatro partidos y no regresó a las Mayores con los oropéndulas hasta la campaña de 1990 y duró con ese conjunto hasta 1992.
 
Fue traspasado a los Indios en 1992, equipo que le dio la oportunidad de mostrar todo su potencial, al convertirlo en cerrador. San Francisco, Marineros de Seattle, Filis de Filadelfia, Piratas de Pittsburgh, Rockies de Colorado y Tigres de Detroit fueron las otras novenas que confiaron en su talento.
 
Mesa tuvo al menos cuatro campañas en las que superó la barrera de los 40  salvados (46 en el 1995, 42 en 2001, 45 en 2002 y 43 en 2004), además de otras dos temporadas de 39 (1996) y 33 (1999).
 
Del 1999 al 2004 fue uno de los cerradores con más salvados en todo el béisbol, con 215 y promedio de 43 por año. Rescató 183 durante los ocho años que lanzó en la Liga Nacional y logró 138 en 13 temporadas en la Liga Americana.
 
Sus años de mayor gloria los consiguió como taponero de los Filis, con los que salvó 112 encuentros en cuatro campañas y con los Indios, al conseguir 104 en siete estaciones. Salvó otros 70  en dos temporadas con los Piratas y 34 con Seattle, también en dos años. Rescató uno en uniforme de los Rockies.
 
Entre sus logros individuales, ocupa el lugar 12 de todos los tiempos entre los relevistas con más partidos lanzados y los 321 salvamentos lo ubican en el puesto número 20. Es número 15 de por vida en partidos terminados con 633.